Evita el contacto con agua, perfume y productos químicos.
Ordena y mantén limpios tus accesorios.
Retira tus accesorios antes de una ducha, antes de dormir o de realizar ejercicio.
Separa y guarda tus piezas por separado en un lugar alejado del polvo y humedad, en bolsas de gamuza o en organizadores con compartimentos individuales.
Evita golpes, rayaduras y cambios bruscos de temperatura.
Al limpiar, hazlo con una franela o paño especial para joyería.